jueves, 30 de diciembre de 2010

Año Nuevo y El hombre en busca del sentido

“Quien tiene un porqué para vivir,
encontrará  fácilmente el cómo”
F. Nietzsche.
Hace tiempo leí el libro “El hombre en busca del sentido” de Víctor Frankl, lo leí porque un sacerdote Capuchino amigo lo citaba constantemente, el capuchino es también un psicólogo sumamente involucrado en la logoterapia cuyo creador es el propio  Víctor Frankl (Aplicando la logoterapia el paciente se enfrenta con el sentido de su propia vida, confrontando enseguida su conducta actual con ese sentido).
El libro de manera autobiográfica  relata su experiencia como prisionero en un campo de concentración nazi y dado que Víctor Frankl era psicoterapeuta hizo un análisis profundo sobre lo que ahí ocurría.
El hombre en busca del sentido es una gran parábola y pienso que de cierta manera en la actualidad el ser humano se encuentra también atrapado en un gran campo de concentración donde el Ejercito que nos mantiene presos esta formado por el egoísmo, la envidia, el miedo, la violencia, el hedonismo, el materialismo, la apatía, el odio, el hambre, la pobreza, en fin todas las grandes miserias humanas que el hombre ha ido alimentando.

Citaré aquí algunos de los puntos más importantes del libro, y les invito a reflexionar en lo paradójico que resulta percatarse de que cada uno de ellos resulta una verdad tan actual en nuestra gran familia humana:
  •        El  ser humano es una raza completamente influida por su entorno.
  •        La apatía es utilizada como un mecanismo defensa.
  •       Había una única cosa que no se le podía arrebatar a un recluso de un campo de concentración, su libertad interior, su yo mas intimo. A pesar de las condiciones a las que se veían expuestos los prisioneros cada uno decidía que tipo de persona deseaba ser.
  •      Los prisioneros eran dignos de sus sufrimientos y la forma en que los aguantaron fue un logro interior genuino. Es esta libertad espiritual, que no se nos puede arrebatar, lo que hace que la vida tenga sentido y propósito
  •       Lo que más preocupaba a los prisioneros era si sobrevivirían en el campo de concentración. Porque si no se preguntaban aquello sus sufrimientos no tendrían sentido puesto que era una vida cuyo único fin era superarla.
  •      
  •       La observación psicológica de los prisioneros demuestra que solo aquellos a los que no le derribaba su sostén moral y espiritual caían víctimas de las influencias degenerantes del campo.
  •      El hombre tiene la peculiaridad de no poder vivir sin mirar al futuro. Esto a veces le salva en los momentos más dificultosos de su existencia. Cuando uno sufre se crea una fortaleza pensando que vendrán tiempos mejores y se imagina a uno mismo realizando cosas que satisfacen su psique.
  •       Puede decirse, que todo aquel que perdía la fe en su futuro estaba condenado, se desmoronaba su sostén interno y sufría una crisis, producida por el aniquilamiento físico y mental. Cuando la gente perdía la esperanza por vivir, eran presos de enfermedades, las cuales su cuerpo no rechazaba.
  •      En el campo, no se estaba permitido impedirle a alguien que se suicidara. Por ejemplo, no se permitía cortar la cuerda del que se iba a ahorcar. Por ello había que impedir que se llegara a tal extremo. Para ello se usaba un método de psicoterapia o psicohigiene. Se le buscaba a la vida del individuo con ganas de suicidarse una meta, un fin que le diera sentido a esa existencia de sufrimiento, con ello la persona luchaba contra la adversidad del campo de concentración.
  •       Finalmente se concluye con la respuesta a una pregunta que mucha gente se ha formulado pero que muy pocos han podido responder con tal exactitud: ¿Que es, en realidad, el hombre? Es el ser que siempre decide lo que es. Es el ser que ha inventado las cámaras de gas, pero asimismo es el ser que ha entrado en ellas con paso firme musitando una oración.
  • Después de libres una nueva realidad y un solo temor, el temor a Dios.
Nosotros los seres humanos somos el Dr. Frankenstein le hemos dado vida al monstro que ahora nos persigue,  atemoriza y alimentamos.; y lo que es peor nos divide y nos pone a la defensa ante nuestro prójimo.

Que este año que inicia nuestro sentido de vida este basado en el Amor, la Verdad, la Justicia y la Paz, ello traera plenitud y gozo a nuestras vidas. 

Si caminamos juntos, Dios nos bendecira a todos juntos!
Rezamos y Agradecemos Juntos!  Feliz Año Nuevo!

domingo, 19 de diciembre de 2010

Los límites del Amor


                 
"Nadie es una isla en sí mismo; cada hombre es un pedazo de continente, una parte de la tierra. Si el mar se lleva una porción de tierra, toda la tierra queda disminuida, como si fuera un promontorio, o la casa de uno de tus amigos, o la tuya propia.
La muerte de cualquier hombre me disminuye porque estoy ligado a la humanidad; por consiguiente nunca hagas preguntar por quién doblan las campanas: doblan por ti."
John Doone

Hace dos años Marisela Escobedo Ortiz sufrió la pérdida de su hija Rubí Marisol Frayre de tan solo 16 años, la joven fue asesinada; Desde ese entonces Marisela decidió caminar incansablemente en búsqueda de la justicia, en busca de pruebas, en busca del asesino de su hija. Su férrea convicción tuvo éxito y el presunto asesino se declaró culpable, pero el sistema judicial lo dejo inexplicablemente libre. El pasado jueves 16 de Diciembre, mientras protestaba afuera de la casa de gobierno de Chihuahua la señora Marisela fue cobardemente asesinada.

¿Y dónde estaba  Dios? Me preguntó un amigo sobre este caso, y solo atine a contestarle con profunda tristeza “Dios estaba esperanzado en que no ocurriera, en que se hiciera justicia, en que el hombre no apretara el gatillo contra Marisela, en que los gobernantes arroparan la causa justa de aquella mujer, en que la sociedad civil se sumara. Dios siempre tiene la esperanza de que el hombre se vuelva al Amor”, no dije nada más, y mi amigo debió sentir el dolor en mis palabras y tampoco agrego nada.

San Juan de la Cruz escribió: “En el ocaso de nuestras vidas seremos juzgados por el Amor”, ¿Cuál es ese amor por el que seremos juzgados? ¿Será suficiente el amor a Dios, solo a Dios? ¿Se puede amar a Dios sin amar al prójimo?

Les invito a reflexionar juntos una sola pregunta:

¿Cuáles son los límites del Amor?.

Para contestar a la pregunta podríamos empezar por reconocer la manera en que asumimos las siguientes realidades que tanto nos laceran como gran familia humana: Violaciones a los Derechos Humanos, trata de mujeres, trata de personas, tráfico de niños, desapariciones forzadas, abusos de autoridad, tráfico de órganos, violencia de género, pobreza extrema, inocentes presos, criminales libres, jóvenes sin escuela, desempleo, corrupción, impunidad, delincuencia, crisis económica, etc. etc.

Soy un convencido de que solo si uno se permite ver las realidades humanas, podrá el corazón ser tocado y movernos a actuar. Conozco el caso de un religioso, que nació en una familia acomodada, y era de una espiritualidad bastante conservadora, así que su amor era solo bueno, quizás limitado. Lo enviaron al sur del país, ahí fue testigo de la miseria en que viven muchas familias y del abuso constante que padecen, algo cambió dentro de él, porque después de que el corazón "ve" ya no se es el mismo, y él mismo confiesa que entre las injusticias y los pobres fue evangelizado, entonces su capacidad de amar alcanzo nuevos límites y su compromiso le ha llevado a encabezar causas justas. El hoy Obispo expandió los límites del Amor. Muchos hombres y mujeres expanden los límites del amor a diario, porque descubren que amando se saben amados también por Dios.

Jesús definió los límites del Amor y los hizo vida. "No hay amor mas grande que dar la vida por los amigos". Juan 15:9,17
 
Ahora pregunto ¿Cuales son los límites de nuestro Amor?

Que está Navidad nos permitamos expandir los límites de nuestros corazones, que nos permita pensar en todos aquellos hermanos que padecen realidades difíciles y eso sea suficiente para incomodarnos, movernos y comprometernos, dando un uso adecuado a nuestro corazón, amando a quien más lo necesita.

Seguro alguien vendrá y también nos dará ese largo y caluroso abrazo del Amor.

Rezamos, Amamos y Agradecemos Juntos!

domingo, 12 de diciembre de 2010

Dolor y Sensibilidad

“El idioma del corazón es universal; sólo se necesita sensibilidad para entender y hablarle.”
Jacques Duclos

Entre los anuncios navideños que ya asoman en la televisión hay uno que me a sorprendido gratamente por su sencillez y mensaje. Trata de un hombre viejo y amargado quien al parecer vive solo; bien pues sus vecinos diseñan una estrategia para romper el cerco que representa el corazón de Don Pepe (nombre del amargado), y así un vecino lo ve y le receta un “Feliz Navidad Don Pepe”, después el vecino se comunica con otro vecino quien al encontrarse con aquel viejo le receta la misma frase “Feliz Navidad Don Pepe”, y así comunicándose un grupo de gentes (al parecer a algunos se les involucra y suma espontaneamente en la estrategia); y aquel hombre de avanzada edad empieza al principio recibiendo el mensaje de mala manera y poco a poco empieza a ceder al gesto, al final del anuncio el propio Don Pepe le dirá a alguien “Feliz Navidad”.
Sensibilidad es la  “Tendencia a dejarse llevar por los sentimientos de compasión y amor”.
Pienso en la cantidad de personas (no solo maduras) que como don Pepe están solos, han sido abandonados (literal y análogamente hablando) y ello ha endurecido sus corazones. Soy un convencido de que todos cargamos dolores, de que todos somos víctimas, de que en todos hay esperanza. El gran problema reside en que quienes les rodeamos no nos damos tiempos de amarles y ser amados por ellos.
Esta semana vi el corazón esperanzado de mujeres familiares de desaparecidos, y fui testigo de cómo  un corazón que podría estar consumiéndose en el dolor, la desesperación y la desesperanza, late aun con fe gracias a la fraternidad y el abrazo que les han dado miembros de la sociedad civil organizada sensible a sus realidades , algo que los políticos y aún sus comunidades de fe a las que pertenecen no lograron.
Somos testigos del sufrimiento de mucha gente y de la frialdad de muchos de quienes les rodeamos, de la incapacidad de que esas realidades nos duelan, nos lastimen.
Jesús no soportaba el dolor ajeno, y su sensibilidad se repite una y otra vez a  lo largo de los evangelios, en la viuda, en la mujer de fama publica, en Lázaro, en el centinela, en los recién casados, ciegos, endemoniados, leprosos, la multiplicación de los panes y peces, etc., etc..
La sensibilidad de Jesús solo le permitía una respuesta al dolor del hermano: EL AMOR.
La construcción del Reino no puede iniciar si no emergemos nuestra sensibilidad al dolor ajeno, nuestro corazón deberá en todo momento recordarnos ser sensibles a las Injusticias, ser sensibles a la falta de Verdad, ser sensibles a la falta de Paz y ser sensibles a la falta de Amor; reconocernos así frente a las realidades de este mundo debería ser suficiente para buscar estrategias convencidas, fraternas y permanentes como la usada con eficacia con Don Pepe.
Rezamos y Agradecemos Juntos!

lunes, 6 de diciembre de 2010

Sobre la Conciencia

                                                           
  "No hagáis nada vergonzoso delante de vuestros amigos,
ni en presencia de testigos, ni cuando os halléis enteramente solos;
respetaos sobre todo á vosotros mismos."
Pitagoras

Esta semana una tía entrada en años me compartió algo que me pareció bello por su simpleza, honestidad y profundidad. Me dijo que hacía unos días llegó a su casa después de hacer algunas compras y sacó de entre las bolsas de mandado dos litros de agua purificada que había comprado y que colocaba sobre la mesa de la cocina cuando un indigente tocó a su puerta y le pidió agua para beber; Ella entró a la cocina, miró de reojo los dos botellones de agua purificada sobre la mesa y los ignoró, agarró un botellón vacio y lo llenó de agua de la llave y se disponía a darlo al indigente cuando volvió a  mirar los dos botellones de agua purificada y algo dentro de ella dolió y se avergonzó por su egoísmo, entonces tomo un botellon nuevo para compartirlo; al salir le dijo al indigente,” tome este litro de agua, espero le dure todo el día”.
Quedé conmovido por la historia, mi tía estaba genuinamente preocupada ante el asalto de sus pensamientos egoístas, “espero siempre tener buena conciencia de mis actos” me dijo.
En el conocido cuento de Pinocho el hada madrina además de dar vida al títere también le dota de una buena conciencia en la figura de Pepe Grillo, cuya misión será advertir con oportunidad a Pinocho sobre  lo que es bueno y lo que es malo. Aqui pregunto: ¿Y nuestro Pepe Grillo que tan alto eleva la voz?
Mucha tinta ha corrido cuando se habla de la buena y mala  conciencia, esta vez enfoquémonos en solo algunas preguntas ¿Cómo se debilita o fortalece nuestra conciencia? ¿Es nuestra conciencia espejo de arrepentimientos, o es una efectiva herramienta de prevención? ¿Es nuestra conciencia prisionera ó guardián en nuestras vidas?
Reflexionando sobre ello con un  hermano mío (Esteban), me compartió algunas ideas, que aqui reproduzco y que me parecen reveladoras desde un enfoque cristiano:
“Nadie puede dar lo que no tiene, ni dar lo que no quiere, si das en Dios es porque has sembrado de Dios en tu corazón; En mucha gente el sentir de Dios se ha sembrado como una pequeña chispa, algunos la mantienen encendida y otros la apagan en su vida, si le suministramos suficiente aceite (palabra de Dios) traerá luz a nuestra conciencia y esta reflejara realmente lo que somos.
La crueldad que hoy exhibe el ser humano, se podría explicar en una psiquiatría cristiana como: "AUSENCIA DE DIOS", o bien "FALTA DE CONCIENCIA EN DIOS".
El mundo y sus cosas quieren cicatrizar nuestra conciencia, estamos siendo llevados a una ceguera y no oponemos resistencia.
Debemos buscar el sentir de DIOS, no buscar que DIOS se allegue a nuestro sentir. Todo cambio produce dolor, pero si el cambio es en DIOS produce frutos (bendición) (gálatas 5:22-23),  para que esto ocurra tenemos que tener conciencia (compromiso)  de DIOS en nuestras vidas. Si nos abrazamos de DIOS, él nos dará la victoria, lo que nunca es fácil.
En la biblia Dios dice a Josué dos veces “esfuérzate y se valiente” (Josué 1:7,1:9) cuando iba entrar a la tierra prometida que tenía que conquistar y en el cual había gigantes.
Nuestros gigantes a vencer son la envida, el egoísmo, la arrogancia la incredulidad, el mundo también cree y tiene su propio gozo, pero al final de este trae pesadez, frustración, estrés, depresión  y sin importar condición económica a muchos los ha llevado a la  locura y suicidio; Si avivamos nuestra chispa (conciencia en Dios) habrá un gozo tal en DIOS que nos acompañara siempre.”
Yo solo agregaría que nos toca a nosotros decidir al final qué tipo de agua queremos dar a nuestros hermanos, si la purificada o la sucia; finalmente la gente recibira lo que nuestra conciencia decida y nuestro corazón albergue.
¡Rezamos y agradecemos juntos!