domingo, 31 de julio de 2011

Dios idea del hombre; El hombre idea de Dios

Resulta muy ironico que segun las estadisticas oficiales México sea un país de Cristianos en un 89% (entre catolicos y no catolicos) y que en los hechos no se vea reflejado. Decir que en un Universo de 10 personas 9 sean cristianas, bastaría para generar un mínimo de respeto, de fraternidad, de solidaridad, de justicia, de verdad, de paz y de amor. Pero en los hechos no es asi ¿Por qué?.
Yo tengo una pequeña teoría, y la comparto: Creo que cada quien tenemos una idea de Dios, y muchas además equivocadas.

Por ahí circula un mensaje que dice que sacamos a Dios de nuestras vidas, yo diría que acomodamos a Dios a nuestras vidas, a nuestras voluntades individuales.

A Nicodemo poco le sirvió ser parte del Sanedrín y letrado en el Antiguo Testamento; no pudo entender a Jesús quien le invitaba a nacer de nuevo. Su idea de Dios le impedia ver el amor de Dios. Una idea equivocada de Dios, nos deja una relación equivocada con Dios y en consecuencia con el projimo.

Hace algunas semanas un sacerdote catolico muy conocido en la comunidad de Monterrey afirmó que uno de los graves problemas es que en México "hay muchos catolicos, pero poco cristianos"; entiendo que lo hizo con la intención de invitar a los catolicos a asumir un rol mas activo mediante la (radical) imitación a Cristo.

Hay mucha violencia, mucha pobreza y marginación, tenemos a niños, adolescentes y jovenes con temores y angustias de adultos, hay mucha discriminación e intolerancia, mucha injusticia, mucho abuso sobre quien menos tiene, mucho silencio complice, mucha arrogancia, mucho egoismo, hay hambre, y sobre todo hay mucho dolor.

Es hora de ser valientes y asumir una fé comprometida, firme, convencida, sin ideas equivocadas que nos gobiernen. El camino del Amor, la justicia y la humildad es lo que pide Dios en boca del profeta (miqueas 6,8).

Una bella forma de empezar sería haciendo vida la oración de San Francisco de Asis, quien lejos de hablar de su idea de Dios, busco humildemente vivir la idea de Dios-Amor en el projimo:

Señor, hazme un instrumento de tu paz.
Donde haya odio, siembre yo amor;
donde haya injuria, perdón;
donde haya duda, fe;
donde haya tristeza, alegría;
donde haya desaliento, esperanza;
donde haya sombras, luz.

¡Oh, Divino Maestro!
Que no busque ser consolado sino consolar;
que no busque ser amado sino amar;
que no busque ser comprendido sino comprender;
porque dando es como recibimos;
perdonando es como Tú nos perdonas;
y muriendo en Ti, es como nacemos a la vida eterna.


Rezamos y Agradecemos Juntos!















lunes, 18 de julio de 2011

El hijo pródigo un día después

...Pero el padre dijo a sus siervos:
"Traed aprisa el mejor vestido y vestidle, ponedle
un anillo en su mano y unas sandalias en los pies.

Traed el novillo cebado, matadlo, y comamos y
celebremos una fiesta, porque este hijo mío estaba muerto
 y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado".
Y comenzaron la fiesta...


De todos los libros escritos en la historia del hombre, ninguno es tan rico literariamente hablando que la Biblia, y de todos los libros de la Biblia lo es el Evangelio de Lucas y del Evangelio de Lucas lo es la Párabola del Hijo Pródigo Lc 15-11,32. (Para quienes caminamos en la fé, la Biblia es la palabra de Dios).

Quizás ninguna otra parábola represente tan claramente los alcances de la Débilidad humana y la grandeza del Amor de Dios. De la párabola se ha escrito mucho, algunos libros (partícularmente recomiendo "El abrazo del Padre" de Alessandro Pronzato).

La semana pasada despues de escuchar a alguien hablar de su proceso de conversión y su regreso a casa del Padre, vino a mí la recurrente sensación de que es corta  nuestra visión respecto a la parábola; entonces pensé, que quizás el detalle se encuentra en que consideramos que la historia concluye en el regreso a la casa del Padre, como si ese fuese el fín mismo. Partícularmente pienso que es justo en el regreso a la casa del Padre, cuando inicia la historia del Amor Pleno, cuando el proceso liberador se concreta y entonces deberíamos ver desde el Amor del Padre, el Amor al Prójimo, comenzar nuestra siembra, nuestra historia.
Pienso que siempre se corre el riesgo del egoísmo en un caminar cristiano mal entendido, en el que ya en casa, nos perdemos pensando en si podemos o no disponer de un cabrito para los amigos, si somos dignos o merecedores de Amor, o simplemente hacer como que la casa del Padre es solo para dos.

En la Parábola el hijo es revestido de toda dignidad por el Padre, porque su regreso significó para el Padre la oportunidad de Amarle como solo él sabe hacerlo, pero tambien en el hijo en su discernimiento encontró el reconocimiento de que ese Amor se extiende al empleado mas pequeño, al que nunca le falta nada que comer.

¿Que podemos suponer que pasa con el hijo pródigo un día después?
Mi corazón me dice lo siguiente: Que no se guardó para sí todo el Amor recibido, sino que vivió la plenitud del Amor del Padre, en el Amor a los demás. Encontró en la donación un regreso fraterno a la casa del hermano.

San Pablo, La Magdalena, San Agustín, San Francisco de Asís, Santa Margarita de Cortona, San Gabriel de la Dolorosa, San José de Calazans, Santa Teresa, San Guillermo, San Juan Gualberto, San Dimas, San Conrado de Piacenza, San Ignacio de Loyola, Santa Eudoxia, Santa Afra, Santa Daría, Santa Sira, etc., etc., todos ellos grandes pecadores, que a su regreso a casa encontraron la convicción de amar al prójimo con valentía, con coraje y con todo sacrificio, y eso ha hecho de nuestro mundo un lugar mejor. Se donaron a los demás.
Me despido con una breve oración: "Padre Bueno, que encontrandote a tí, encuentre al prójimo  y pueda replicar tu amor en él, que reconozca la amplitud de tu casa y a sus moradores. Amén"
Rezamos y Agradecemos Juntos!

lunes, 11 de julio de 2011

Su Cruz, Mi Cruz.

Nacemos para vivir, por eso el capital más importante
que tenemos es el tiempo, es tan corto nuestro paso por este planeta
que es una pésima idea no gozar cada paso y cada instante,
con el favor de una mente que no tiene limites
 y un corazón que puede amar mucho
 más de lo que suponemos.

Facundo Cabral

Mi hija de tan solo 8 años le preguntó a su madre "¿mamá, es cierto que cada vez que alguien comete un pecado, Jesús va a la cruz?" mi esposa le contesto "así es", luego la niña agregó: "con tanta maldad que hay ahora, creo que Jesús se va a acabar"; Nos quedamos sin habla.

Ya mas tarde despues de una reflexión, me acerque a mi hija y le expliqué, que la gente que da amor a los demás, que hace el bien por otros, acompañan a Jesús a ir a la cruz, y por tanto,  que a veces cargan tambien con esa cruz por amor. Le enfatizé que la gente buena era mucho mas que la gente que estaba enojada por alguna razón y eso los hacía obrar mal. Ella solo asintió.

Esta semana dos dardos simultaneos: Una masacre y el asesinato de Facundo Cabral. El primero sin importar quienes ó porqué, nos lacera y lastima como sociedad; el segundo, un personaje que insistía en que las cosas mas caras de la vida son gratis y estan al alcance de todos, porque son generadas por el amor y Dios almacenó en el hombre mucho, muchisimo de eso. Una vez tuve la oportunidad de intercambiar algunas palabras con él después de un recital, y en otro momento una hermana mía le invitó a comer y él aceptó gustoso. Era un hombre libre,  que conocía y amaba su cruz.

Mi pensamiento ahora escapa hacia Simón el Cirineo, obligado a cargar la cruz de Jesús al Gólgota(Mt 27,32; Mc 15,21), me imagino en él, a nosotros mismos con cargas que no queremos asumir, deseando solo ser espectadores del dolor, ajenos al dolor, lejos del dolor; mi corazón me dice que el Cirineo comprendió que aquellas llagas y aquella cruz eran las de todos los hombres, las del él mismo. También la biblia nos dice que iba acompañado por dos hijos, de nombres Rufo y Alejandro, cuyas vidas también cambiaron con aquel hecho. (Según la tradición se hicieron Misioneros).

Debemos asumir así todo dolor de este mundo, como dolor propio, dolor de uno, dolor de todos y comprender que nada nos es ajeno, y que el problema es y será siempre sembrar amor.

Finalmente una pregunta al aire ¿Nos escondemos o nos asomamos; rehuimos ó asumimos, sumamos ó restamos?

Termino con una pequeña oración:

"Dios, enseñanos a amar, comprender y aceptar, que toda cruz forma parte de la cruz de Jesús, quien sin distingos, nos amó a todos." Amén.

¡Rezamos, amamos y agradecemos juntos!